El control de la velocidad durante los ensayos de tensión es esencial para obtener mediciones precisas de esfuerzo y deformación. La norma define distintos modos de expresar la velocidad del ensayo, y establece límites para garantizar que los resultados no se vean afectados por una aplicación de carga demasiado rápida o descontrolada. También se ofrecen alternativas según el tipo de equipo disponible, incluyendo ajustes por velocidad de cabezal o tasa de carga aplicada al material.