Para obtener resultados confiables en un ensayo de tracción, es imprescindible que la máquina esté en óptimas condiciones, dentro del rango de carga apropiado y calibrada conforme a la norma ASTM E4. Este punto también advierte que los registradores de esfuerzo-deformación pueden tener sistemas de medición separados que deben ser calibrados de forma independiente, lo cual influye directamente en la precisión de los gráficos obtenidos.

Un técnico realiza un ensayo de tracción, pero observa que los resultados varían significativamente entre pruebas del mismo lote. Al revisar el equipo, detecta que el registrador de esfuerzo-deformación no había sido calibrado en meses. Luego de realizar la calibración conforme a ASTM E4, los resultados se estabilizan, evidenciando la importancia de mantener el equipo en condiciones óptimas.

Una máquina mal calibrada o deteriorada puede arrojar resultados completamente erróneos en los ensayos de tracción. Esto puede provocar la aceptación de materiales defectuosos o el rechazo de productos en buen estado. Además, si los dispositivos registradores no se calibran por separado cuando lo requieren, las curvas esfuerzo-deformación obtenidas no serán confiables ni trazables para fines técnicos o legales.